(Dios te salve Norteamerica)
Jack Kerouac siempre fue un borracho. Un día, se le ocurrió cruzar Norteamérica de este a oeste, y viceversa. De aquí para allá, de allá para acá. Autos destartalados. Buses de segunda. Trenes de tercera. Entre tanto kilometraje acumulado, escribió un libro. En el camino. Años después, los medios lo convirtieron en un mito. Cuando lo llamaron de la tele, millones de niños esperaban junto a sus padres al nuevo superhéroe norteamericano. Con capa y logotipo en el pecho. Los jóvenes querían ser como él. Los padres volver a ser jóvenes. Grande fue la sorpresa. El santo caminante tenía un barril de cerveza en el estómago. Callos en las manos. Juanetes en los pies.¿El rey de los beatniks? El rey de los hueones será. De los vagos. De los acabados. Dónde está nuestro salvador? se preguntaron en California. ¿Quién diablos es ese fracasado?!!! gritaron en Nuevo México. Lo mataron, lo desterraron, lo aniquilaron antes de ir a la tanda comercial. El conductor pidió excusas a sus televidentes. Los auspiciadores amenazaron con abandonar el programa. Y los estupendos norteamericanos volvieron a sus camas. Todos a dormir tranquilos que mañana será otro día.
9 comentarios:
Historia tan repetida... por los siglos de los siglos, Himén...
pero algunos deben hacer el dulce (o angustioso) sacrificio, para que la familia feliz se entretenga con historias prestadas... es la historia de siempre...
pero lo comido y lo bailado de Jack... Ni yo, ni usted, ni nadie...
Sergio Gómez y Bukowski!!?? No recomiendo esa fusión. Kerouac y su famoso libro nunca terminó de engancharme, quizás por la expectativa o vaya a saber qué.
Los borrachos están bien, pero a veces el licor o la cerveza o el litro de vino empapa hasta la cubierta del libro, y eso es bueno hasta cierto punto solamente.
Quizás a C.M. le faltó cruzar Chile de punta a punta o tener un amigo como Dean Moriarty.
Ayer escuchaba en casa de un amigo unas grabaciones de Kerouac. Sus manos habrán sido ásperas pero su voz era muy dulce, sobre todo cuando le recitaba a su madre.
Sergio Gómez... wow. tanto tiempo sin verlo. Así que con blog caballero? Escribes bello. Y por cierto, que buen libro me has recordado con tu nick.
Un abrazo inmenso.
tengo varios cd´s con kerouac leyendo. tienes razón con el comentario sobre su voz.
Leí a Kerouac con la imnadurez propia de los 14 años para la clase de literatura... asumo que era una chica demasiado "overprotected" por mi criculo, entonces no conocía mucho de la vida.
Pero ahora con vaaaarios años más en el cuerpo ( y mucha agua que ha pasado bajo el puente), me reencontré con mi viejo libro, y si... se ha vuelto uno de mis pequeños objetos de culto... tal es que no lo presto por nada del mundo (presté la primera edición de Mala Onda y aún no vuelve)
Gracias por hacerme recordar esto!
Regards
Paly Messer S.
galo: hay un libro, que no recuerdo el nombre, dedicado a su hermano mayor que murió muy niño. es pura ternura beat.
C.M: dele otra oportunidad a Kerouac. Nunca es tarde.
Excursiones: como le fue en el norte?
Paly: nunca lo prestes. byo me he tenido que comprar 6 veces "en el camino".
walter: siempre sabio
abrazos para todos
Estimado.
Me gusta mucho tu muñeca y siento especial sintonia con los temas que tratas (en nuestro segundo numero publicamos una entrevista a Miguel Laborde, y me agarre de un par de frases para escribir un parrafo sobre los beatniks). . Te dejo muy invitado a revisar la revista bifurcaciones, y a enviar cualquier tipo de colaboracion (una reseña literaria seria ideal).
Saludos,
Ricardo Greene F.
www.bifurcaciones.cl
Gracias! Tomo la invitaciòn.
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